Por Luis Gabriel Forero & Stella Díaz
El ser humano por naturaleza desea y anhela poder. Prefiere ser cabeza y no cola, prefiere mandar y no ser mandado, prefiere dar órdenes y no obedecer; y para ello, en ocasiones actúa con: Engaño, envidia, odio, suplantación o vanidad, como podemos extractar de la Parasha Toldot.
Toldot es el plural de Toldá que significada: Generación, descendiente, historia o memoria. La Palabra Toldot se define de dos formas: una es “descendencia” (hijos) y la otra, es “buenas acciones”, como lo explica el Midrash: “lo trascendental de la progenie –hijos- de los Tzadikim (justos) son su Torá y Mitzvot”. La Torá nos explica a través de sus escritos, cuáles fueron los méritos que tuvo Itzjak para tener Toldot (descendencia y buenas acciones): En virtud a que Abraham concibió a Itzjak, es decir en mérito a Abraham Avinu; esto, hace referencia a que nuestros actos y comportamientos, impactan positiva o negativamente a nuestras generaciones y descendientes. Así como los actos y comportamientos de Itzjak y Rivka, impactaron negativamente la vida de Esav (Esaú) y de Iaakov (Jacob), generando confrontación, rivalidad, suplantación y odio entre hermanos. Pues Itzjak prefería a su hijo Esav, mientras Rivka prefería a su hijo Iaakov. Esta rivalidad empezó desde el vientre de Rivka como dice en Génesis 25:22 “como los niños luchaban dentro de su seno, ella se preguntó: si esto va a seguir así, ¿para qué sigo viviendo?”
¿Qué se entiende por Dualidad de Mando? Y ¿Por qué se evidencia en esta parasha? Según la Real Academia de la Lengua, “Dualidad”, es la existencia de dos caracteres o fenómenos distintos en una misma persona o en un mismo estado de cosas. Mientras “Dualidad de Mando” se entiende como un error administrativo, que consiste en que un subalterno o colaborador, debe dar cuenta del cumplimiento de sus deberes ante dos superiores jerárquicos, y recibir instrucciones de ambos. Un principio elemental de organización, propone evitar la duplicidad de posiciones de autoridad en la empresa (o familia). Un solo jefe (cabeza) en la organización y en cada una de sus partes, profesa este principio. Y en términos de Administración, vale la pena recordar, que el líder o cabeza, “delega la autoridad, mas no la responsabilidad”…
Hemos aprendido a lo largo del estudio de la Torá y la Brit HaDasha, la importancia de los roles dentro del hogar, donde el esposo es la cabeza (rosh רֹאשׁ) y la esposa es la ayuda idónea o “contraria” (mujer virtuosa – Eshet Jail), entendiéndose por contraria, la que orienta, persuade o corrige al esposo, cuando éste no va a tomar la decisión correcta. La esposa como ayuda idónea debe estar guiada y sujeta a la Ruaj HaKodesh. La relación de Rivka con Itzjak no era la misma que había entre Sará y Abraham o entre Rajel y Iaakov. Cuando ellos tenían un problema, no temían hablar de eso, pero no ocurría lo mismo con Rivka e Itzajak. Ella asume una autoridad aún por encima de su Rosh (su esposo), pero tiene total responsabilidad sobre el conflicto entre sus hijos…
Lo mismo que en las familias, sucede en las empresas u organizaciones, si hay dos jefes (dos cabezas) es necesario que los dos estén en unidad de mando, en armonía y en sabiduría para la toma de decisiones. Si los dos están en oposición y se llevan la contraria, los colaboradores se darán cuenta de esto, entrarán en conflicto con las órdenes e instrucciones que reciben y el clima laboral se afectará.
En la parasha Toldot, nos damos cuenta que Itzjak y Rebeca, fallaban en su comunicación como pareja, no había unidad como esposos, pues cada uno tenía su preferido, y cada uno tenía comportamientos opuestos, dando instrucciones para defender a su preferido (perjudicando al otro). No hay una verdadera unidad como pareja. No eran una sola carne – ejad. En Mateo 12:25 Yeshua dice: “Todo reino dividido contra sí mismo quedará asolado; toda ciudad o familia dividida contra sí misma no se mantendrá en pie”.
En esta parasha Toldot, nos relata la competencia y rivalidad desde la concepción y nacimiento de los dos hermanos, pues desde el seno materno se venían peleando según el milenario texto. Lo peor vendría después: conseguir la primogenitura, suceder a Itzjak en el gobierno de las tribus de Israel, alzarse con el poder absoluto y asentarse en la tierra prometida. Ya se lo había dicho Di-s a su madre, Rebeca, “dos naciones hay en tu seno y el pueblo será dividido”. Un reino dividido no permanecerá… Donde no hay armonía, el resultado será miseria y tragedia. También en 1 Reyes 12 nos relata la división del reino, y los buenos y malos ejemplos de los reyes de Israel y de Judá. Y Esto también lo podemos ver en el mundo actual, que, por las ansias de poder, conflicto de intereses, odio y obsesión de eliminar a un pueblo, se desató la Guerra contra Israel, por parte de los terroristas de Hamas, donde no solo el pueblo de Israel, sino también los Palestinos están siendo víctimas de los terroristas de Hamas, al ser usados como escudos humanos, para protegerse y evitar ser atacados…
Este conflicto actual tiene su origen en parte en esta parasha, al no solucionar el conflicto entre los hermanos. Esav vende su primogenitura a cambio de un plato de lentejas, y luego pelea con su hermano Iaakov y además le reclama a su padre el hecho de haberle dado la bendición de primogénito a su hermano (quien lo ha suplantado por instrucción de su madre Rivka o Rebeca), victimizandose y haciendo caso omiso, a la decisión errada, emocional y momentánea, por la sensación de hambre y cansancio, cuando él mismo cedió su primogenitura a su hermano mellizo. Y desde allí aparece el deseo y ansias de Esav de eliminar/matar a su hermano Iaakov (Israel), tal como está sucediendo en la actualidad por parte de Hamas.
Las personas con adicción al poder, al igual que en otras adicciones, no sólo no reconocen el problema, sino que toda su vida gira en torno a conseguir ese poder, con pensamientos obsesivos y con tendencia al aislamiento. Se despreocupan de otras facetas de su vida, como la relacional o la del ocio. «Es importante en estos casos concretos de políticos (o personas conflictivas, terroristas, extremistas, psicóticos) asumir la realidad, sea la que sea»… citando algunas palabras del neuropsicólogo Manuel Nevado.
De esta Parasha Toldot, podemos aprender y concluir, que, una de las grandes lecciones de la vida consiste en aprender a vivir en armonía con los demás; esto aplica no solamente a las naciones y reinos, sino también a las relaciones personales, familiares, laborales, empresariales, así como en las relaciones y ¡el compartir con los hermanos en la Kehilat!.
También aprendemos que, en una familia, en una organización, empresa o nación no debe haber Dualidad de Mando, por el contrario, debe haber unidad, armonía y buena comunicación entre las partes que lideran, no generando conflicto entre los hijos, los colaboradores, los seguidores, o los ciudadanos, porque eso va a fomentar las ansias de poder y el conflicto de intereses. Lo que se debe transmitir y debe trascender, son las buenas acciones, la unidad y armonía entre líderes, fomentando principios, valores y virtudes, lo cual crea méritos que impactarán positivamente nuestras generaciones. Seamos portadores de luz, de buenas nuevas, sembradores de paz, de unidad, pues “en el mundo tendremos aflicción, pero Yeshua ya venció el mundo”, con él somos más que vencedores.
Y en medio de tanto conflicto mundial, hagamos como Jacob-Iaakov, que de carnal y emocional, rectifica su camino, y el Eterno le cambia su Nombre por Israel (el espiritual), que así sea nuestro caminar, en rectificación, en bendición, en integridad, sin juicios, ni señalamientos, siendo testimonio de la Luz del Mesías en nuestra Vida, trascendiendo y marcando nuestras generaciones con los méritos de Yeshua. En Unidad con el Padre Eterno, respetando las Cabezas (Rosh) que el Eterno ha colocado en Autoridad, desde lo familiar, en lo ministerial, en lo laboral y/o en lo empresarial; y siguiendo el modelo de liderazgo del Mesías de Israel, Yeshua.
Con total certeza declaramos: “Am Israel Jai”
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Luis Gabriel Forero & Stella Díaz de Forero. Ingeniero Industrial y Terapeuta del Lenguaje & la Comunicación; Empresarios, Executive Master Coachs, Conferencistas. Su propósito ser un canal para: Transformar vidas desde su empresa de Consultoría Gerencial en Liderazgo, SoftSkills y Habilidades Directivas; todo fundamentado en principios, valores y virtudes. Son Cabeza del Ministerio de Empresarios, Emprendedores & Profesionales Yovel